Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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Una “Roca” que se hace más fuerte con el paso del tiempo

El pringlense Ignacio Tenaglia, radicado en Bahía Blanca, se consagró subcampeón mundial en Andria (Italia).
Fue por revancha, a Italia, y lo consiguió. El pringlense Ignacio Tenaglia se destacó en el Mundial amateur de kick boxing.

Nicolás Batista

nbatista@lanueva.com

“Será una buena chance para tener una revancha”.

Eso quería el pringlense, radicado en Bahía Blanca, Ignacio Tenaglia: una simple revancha mundialista. Y la tuvo...

El pasado viernes, el representante de Picadora Team, al que apodan “La Roca”, se presentó en el Mundial amateur de kick boxing que se desarrolló y obtuvo la medalla de plata en la categoría hasta 71 kilogramos.

“La verdad es que ahora todavía estoy medio amargado, frustrado, triste, con bronca; no sé, todo junto, quería ganar sí o sí”, expresó Tenaglia, demostrando su temple superador, causado por un entrenamiento de meses, dedicación y un sacrificio económico que sólo los deportistas amateurs conocen.

“La bronca está porque sé que podría haber ganado, pero me costó encontrarle la vuelta a la pelea definitoria. Pero bueno, sí, después de todo creo que a la larga se va a valorar”, añadió el pringlense, quien le sumó otra presea a su currículum mundialista, luego de la conseguida en Praga (República Checa), en 2014.

Tenaglia se consagró campeón argentino de su divisional en agosto pasado, en el marco de una velada que se disputó en el club Independiente (Italia 250). Allí derrotó al porteño Iván Yacobone por decisión unánime.

Algo más en la valija

Ignacio debió superar dos obstáculos para alcanzar su objetivo: al polaco Dawid Polak, al que derrotó por nocaut técnico, y al iraní Aboozar Lorestani, con quien cayó por puntos en el tercer round.

“Me tocaron rivales muy duros, en especial en la final. El iraní era muy complicado. Se movía mucho, se escapaba y abrazaba bastante. Recién en el tercer asalto pude encontrarme cómodo, pero ya era demasiado tarde”, analizó Tenaglia, quien dejó en claro que el nivel argentino está a la altura del mundo.

“El Mundial tuvo un buen nivel. Y nosotros estamos a la misma altura, creo. Por lo menos yo sentí eso”.

Ahora es tiempo de viajes y relajación, con algo más en la valija.